Los Mismos de Siempre.
El recital estaba programado para las 17 hrs., siempre y cuando a las 16 y 30 se abrieran las puertas y comenzaran las bandas teloneras, pero por culpa de la gran tormenta que azotó el país el sábado, la producción de La Renga no quiso arriesgar que ocurriera algo a los músicos uruguayos y no hubo ni homenaje a Riff siquiera, esto es lo que nos dijeron. Las puertas se abrieron, finalmente, a las 19 hrs. y el show comenzó casi hora y media después.
Después de tan larga espera, la banda de hard rock más grande de Sudamérica volvió a Uruguay. ¿El lugar?, el barro del Velódromo de Montevideo fue quien que acogió a quince mil personas, ya que la pista quedó solamente para lucir las banderas, esas ya tan conocidas y otras que hacían su gran debut, uruguayas y argentinas, todas redecorando el Velódromo Municipal. Antes de comenzar el show era todo pasto, luego de las 2 hrs. y media que duró el espectáculo, ese pasto desapareció, no quedó ni un rinconcito verde.
La presentación de un nuevo trabajo discográfico fue siempre la excusa de que toquen en Uruguay, y este 15 de setiembre pasado no fue la excepción, pero lo raro fue que hicieran tantos temas viejos también, no solo los clásicos sino también muchos del Esquivando Charcos, tanto que hasta pareció este el nuevo disco.
¿El show?, espectacular, la verdad que no faltó nada, arrancó el temblor del Parque Batlle con Oscuro Diamante, A tu Lado, El Monstruo que Crece y Montaña Roja, los nuevos temas siempre fueron intercalados con otros no tan nuevos y los que ya tienen casi veinte años, entre los nuevos solo faltaron Palabras Estorbantes y Cualquier Historia. También hicieron Viva Pappo con la participación del productor de Truenotierra, Millo, un gran guitarrista de verdad.
La gente agitó, saltó, hizo pogo y sobre todo cantó durante todo el show, se gritó desde Oscuro Diamante hasta Hablando de Libertad y de seguro los vecinos del parque quedaron muy contentos.
¿Los temas seleccionados?, no voy a nombrarlos todos, pero se acercan a las veinte o más canciones, entre ellas Lo Frágil de la Locura, Bien Alto, Entre la Niebla, En el Baldío, Ruta 40, Mujer Caleidoscopio, Balada del Diablo y la Muerte, El Rey de la Triste Felicidad, El Juicio del Ganso y Veneno, todos estos y más fueron previos a los diez minutos que se tomaron de descanso, descanso bien merecido y mucho más si al volver hacen un popurrí de unos nueve, diez u once temas, entre otros Buseca y Vino Tinto, Mi Saquito Blucero, Negra mi Alma, Blues de Bolivia, Bailando en una Pata y Panic Show para cerrar.
Luego llegó el turno del gran final, como no pudo ser de otra manera Hablando de Libertad fue el cierre pero antes sonó El Rebelde, El Final es en Donde Partí y La Razón que te Demora entre otras, sé que suena reiterativo pero es cierto, uso mucho la frase “entre otras” porque fueron muchas canciones, sin duda la mejor presentación de La Renga en nuestro país.
¿La Banda? ¿qué decir de la banda más grande y explosiva de la región?, un escenario más chico del que están acostumbrados no fue problema para Tete, saltó, corrió y hasta se tiró al suelo sin ningún problema, Chiflo y Manu no estuvieron solos, por momentos, en escena, habían tres saxos y una trompeta, además de la guitarra, bajo y la potencia de la bateria del Tanque que no se cansó nunca.
La verdad que un show terrible, un espectáculo impresionante, desde la puesta en escena hasta el sonido, no falló nada, dicho sonido atronador y el gran temblor hicieron de un verdadero Truenotierra uruguayo.
Espero que esta crónica sirva para hacerte revivir lo mejor o por lo menos algo de dicha noche y si no fuiste, ya ves lo que te perdiste.
Redacción: Diego Curbelo
Fotos: Andres Larrosa